ROMA. – El subsuelo de Roma sigue desvelando restos de su pasado y este viernes se presentaron los últimos hallazgos en el Foro de Trajano, entre los que hay un friso y dos bustos atribuidos al emperador Augusto de joven y otro del dios del vino, Dioniso.
Este nuevo y “excepcional” hallazgo arqueológico fue localizado bajo el primer tramo de la Via Alessandrina, adyacente a la avenida de los Foros Imperiales, construida en la dictadura de Benito Mussolini en 1932 sobre los restos de la antigua Roma.
Y de este modo los Foros de Trajano, el primer emperador hispano (gobernó entre el 98 y el 117 d.C), se han ampliado nuevamente, demostrando que la ciudad es “una caja inagotable de tesoros”, según celebró su alcaldesa, Virginia Raggi, en su presentación telemática.
Las excavaciones en la Vía Alessandrina, costeadas por Azerbaiyán con una inversión de un millón de euros, han permitido encontrar estas piedras que atestiguan el glorioso pasado de una ciudad que hace dos milenios era “caput mundi”, cabeza del mundo.
Entre los vestigios hay una cabeza de la edad imperial identificada con Dionisio (Baco en la cultura romana), deidad de la fertilidad, el frenesí y el vino, y otra atribuida al primer emperador, Augusto, en edad juvenil, según indicaron desde la Superintendencia cultural.
Además, se han encontrado sesenta fragmentos de un friso en el que están representados los pueblos vencidos por Roma hasta ese momento y las grandes gestas de sus legiones.
Un friso que hace dos mil años decoraba los paneles marmóreos y conmemorativos de la Basílica Ulpia o quizá los pórticos de la plaza del Foro de Trajano. Y que fue esculpido para celebrar la “Pax Romana”, el largo periodo de estabilidad iniciado en tiempos de Augusto tras la guerra civil que sepultó la República, en torno al 30 a.C.
Los restos serán expuestos permanentemente en el Museo de los Foros Imperiales en los Mercados de Trajano, a dos pasos de la céntrica plaza Venecia, en el barrio romano de Monti.