Por: Rubén Moreta
Este miércoles 19 de agosto, el nuevo gobierno que encabeza Luis Abinader anunció su Plan Nacional para encarar la crisis sanitaria que ha provocado la pandemia de covid 19.
Dicho plan incluye la contratación de 1,000 médicos, el incremento de la disponibilidad de camas, la inclusión y participación de los ayuntamientos y organizaciones sociales en el desarrollo de las actividades programadas, y lo más importante para mí, la promesa de incrementar a siete mil pruebas PCR diarias y la descentralización de su aplicación.
Todo está muy bien. Pero hay un fallo: marginaron y excluyeron al remendado Hospital Alejandro Cabral de San Juan de la Maguana –que es también un hospital regional- de la posibilidad de realizar pruebas PCR.
Esa acción aislacionista es inaceptable, porque las doscientas treinta y tres mil personas que viven en esta provincia, más los sesenta y un mil setecientos cuarenta y tres que viven en Elías Piña están también flagelados por la pandemia y necesitan medios diagnósticos a tiempo.
Los hospitales que se incorporarán a la realización de las pruebas son el Luis Bogaert, de Mao; Morillo King de La Vega; Cabral y Báez en Santiago; Antonio Musa en San Pedro, Juan Pablo Pina, San Cristóbal; el hospital Taiwán de Azua; la Ciudad Sanitaria Luis Eduardo Aybar, en Santo Domingo; Ricardo Limardo en Puerto Plata, San Vicente de Paúl de San Francisco de Macorís; y el Jaime Mota de Barahona.
¿Por qué demonios dejan fuera a San Juan, si nosotros estamos dentro de las trece provincias con más alto índice de contagios?
Responsablemente doy un paso al frente y protesto por esta exclusión de San Juan. Exigimos que se descentralice hasta San Juan la posibilidad de realización de las pruebas PCR para detección del covid 19. Este pedido es un clamor popular.
El autor es Periodista.
