En un partido casi de exibición, mostrando un dominió total ante su rival, donde el Barcelona buscaba tener victoria convicente en el partido de ida en su casa, los dirigidos por Luis Enrique abusaron del valencia, al derrotarlos 7-0 con 4 goles Luis Saurez y 3 de Lionel Messi.
El 3-0 con el que llegó el Barcelona al descanso no mostró fielmente la diferencia entre los dos equipos, pues el equipo azulgrana mereció una diferencia mayor. El Valencia llegó en crisis al Camp Nou y se marchó con una herida todavía mayor.
Suárez inauguró su cuenta a los siete minutos tras aprovechar una pérdida de balón de André Gomes y el uruguayo repitió cinco minutos después tras una asistencia de Aleix Vidal entre la pasividad de la defensa rival.
El tercer gol fue una maravilla. A los 29 minutos, Neymar prolongó de taco, Suárez dejó pasar y Messi marcó con su clase habitual. El Camp Nou fue un clamor para aplaudir tan bonito gol.
Después, Messi mandó un balón al palo y en el último minuto de la primera parte el árbitro, Ignacio Iglesias Villanueva, pitó penal y expulsó al alemán Mustafi por derribar a Messi en el área. Pareció que el central tocó el balón antes. Neymar lanzó y estrelló la pelota.
El único interés del partido pasó a ser ver cuántos goles más marcaba el Barcelona y “sólo” fueron cuatro porque se relajó. A cambio, el Valencia vivió una pesadilla hasta el final. No mejoró, casi al contrario. Y tampoco ofreció orgullo ante la derrota, casi humillación.
Messi marcó su segundo gol a los 59 minutos al aprovechar un tremendo agujero en la zaga visitante y el argentino completó su hat-trick a 16 minutos del final al aprovechar una grave pérdida de balón de Dani Parejo. Con estos tres goles messi llegó a 501 en partidos de competencia en su carrera
El Barcelona siguió divirtiéndose en lo más parecido a un entrenamiento con público. Suárez hizo su tercer gol a siete minutos del final a pase de Adriano y a tres minutos del cierre anotó el cuarto con un disparo de diestra entre la pasividad rival.
Así terminó un encuentro que no hizo honor a una semifinal de la Copa del Rey. No por lo que hizo el Barcelona, que estuvo feliz, sino por los deméritos de un Valencia hundido.