El proyecto consta de una central dividida en dos plantas de 400 MW y una terminal de gas, que serán construidos en un plazo de tres años y medio en la bahía de Manzanillo, en Montecristi, con una inversión total de 1,700 millones de dólares, un valor que será costeado por las empresas concesionarias.
El consorcio Haina Investment Corp., constituido por esa empresa, junto a Enerla Energía de las Américas y Shell Gas and Power Developement, ganó el primer bloque, que incluye una planta de 400 MW y la terminal de gas; y ofertó un precio de 8.48 centavos de dólar por kilovatio hora.
El ganador de la segunda planta, también de 400 MW, es el consorcio Manzanillo Energy, también integrado por Costa Petroleum Dominicana, que ofertó un precio de 5.82 centavos de dólar.
En una ceremonia, el presidente Luis Abinader afirmó que esta central termoeléctrica se enmarca en el programa de licitaciones públicas escalonadas, que permitirá la instalación de 2,000 MW de capacidad de generación de energía entre 2022 y 2026.
Este programa, según Abinader, permitirá atender el aumento de la demanda proyectado para los próximos años y alcanzar un nivel de reserva de 15 % por encima del pico de demanda máxima.
"Nuestro parque de generación se va a colocar al nivel de los países con mayor nivel de desarrollo tecnológico y económico", dijo Abinader.
El gobernante dijo que, además de estas inversiones, se ha planificado la producción de 625 MW de energías renovables, incluyendo la planta solar de El Soco, inaugurada este lunes.
Estas inversiones, sumadas a las líneas de transmisión que están proyectadas, contribuirán a una "transición energética" y a acabar con el déficit de generación que ha causado recurrentes apagones en el país en los últimos años.EFE
