San Juan, RD.- El descuido y la falta de vigilancia combinados con la falta de energía eléctrica en el cementerio más grande de San Juan, ha generado preocupación tanto a los vecinos como a personas que tienen allí a sus deudos.
Según expresaron pasadas las seis de la tarde la gente teme acudir a un sepelio en el campo santo debido a la ola delincuencial.
Los trabajadores expresan que sus herramientas son sustraídas por desaprensivos que penetran al lugar.
Tras una jornada de limpieza encabezada por la Regidora Bienvenida Suero los afectados por la situación llamaron a las autoridades a disponer más vigilancia en el lugar.
Las profanaciones de tumbas son constantes en el cementerio del sector el Refugio según los quejosos.
Por Peter Pablo Mateo